A la hora de considerar una herramienta sin código, siempre recomendamos tener en cuenta 4 factores clave:

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‍Facilidadde uso. ¿Es fácil para una persona sin conocimientos técnicos de programación utilizar esta herramienta para crear aplicaciones? ¿Hay una gran curva de aprendizaje? ¿Puede alguien que tenga conocimientos básicos de Microsoft Office hacerse con esta herramienta? ¿O requiere mucha formación previa? Este es quizás el factor más importante a tener en cuenta.

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Flexibilidad. ¿Cuánta flexibilidad tiene esta herramienta en cuanto a lo que puedes crear? ¿Es capaz de tomar decisiones complejas entre bastidores y de dar vida a cualquier idea de aplicación sin tener que programar nada?

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Otorgamos puntos extra a las herramientas que le permiten integrarse con otras para obtener funciones adicionales o que le permiten añadir su propio código personalizado. Antes de utilizar una herramienta, considere si es compatible con todas las funciones que desea.

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Libertad de diseño. ¿Te da la herramienta plena libertad para dar vida a un diseño? No todas las herramientas sin código ofrecen una flexibilidad total. Recuerda que esto puede ser un arma de doble filo. Si no confías en tus habilidades de diseño, es posible que desees elegir una herramienta con menos libertad de diseño, ya que a menudo estas herramientas establecerán hermosos valores predeterminados para ti.

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Glide es un buen ejemplo de ello. Puedes personalizar los colores de la marca y el orden de los componentes, pero Glide garantiza que tu diseño siga pareciendo una aplicación adecuada para las plataformas iOS o Android.

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Rentabilidad. Sencillamente, ¿hasta qué punto es asequible esta herramienta? Recuerda, esto puede ser complejo. Algunas herramientas comienzan con una prueba mientras construyes, pero te cobran por publicar tu aplicación en vivo. Otras herramientas tienen límites específicos, como un número determinado de registros en la base de datos o la imposibilidad de integrar otras herramientas en la aplicación sin pagar más. Mientras puedas permitirte los planes de nivel inferior y tengas una sólida monetización para tu aplicación, no te preocupes demasiado por el escalado o los costes a largo plazo, ya que a menudo tendrás ingresos en el futuro para complementarlos.

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Recuerda: Una puntuación baja en cualquiera de las categorías no significa que la herramienta sea mala. Por ejemplo, una herramienta con una alta facilidad de uso, pero baja flexibilidad y libertad de diseño podría indicar simplemente que esta herramienta es increíblemente fácil de usar y perfecta para un principiante. También podría significar que la herramienta se centra en ser la mejor herramienta del mercado para un tipo muy específico de aplicación, como un portal o un mercado.