En 2021, Cliff Swizter y Brian Banks, empleados de Lone Star Communications, un proveedor de sistemas de comunicación médica con sede en Texas, formaron un equipo para introducir algún cambio que mejorara el negocio. Su idea era crear una aplicación móvil, llamada Techstar, utilizando la plataforma sin código Glide. Con ella, los técnicos de la empresa podían acceder al instante a toda la documentación técnica y de soporte del hardware y el software que instalaban o revisaban.

La aplicación ha transformado la empresa. Tanto es así que los ejecutivos han tomado nota, y desde entonces el no-código se ha extendido a otras partes de la empresa. Aquí, Brian comparte sus aprendizajes. 

1. La interfaz de usuario es clave 

Nos ha sorprendido lo rápido que hemos podido construir un prototipo. Pero, sobre todo, hemos aprendido que la interfaz de usuario es clave si quieres que la gente lo use. Primero hay que asentar los fundamentos y asegurarse de que todo funciona, pero no hay que olvidarse de pulir. La mayor lucha que tuvimos fue incorporar todos los datos que teníamos a la aplicación de forma limpia y que quedara bien. Por ejemplo, tuvimos que limpiar muchas de las fotos, porque si no la aplicación parecería un montón de imágenes prediseñadas. 

No siempre es fácil conseguir que la aplicación tenga el aspecto deseado, sobre todo si se compara con un entorno de codificación. Techstar es extremadamente intuitiva por la forma en que configuramos la pantalla de menú, pero nos costó mucho trabajo conseguir que fuera así. Tuvimos que encontrar formas de sortear las limitaciones de la aplicación dentro de la comunidad de soporte de Glide. Ahora mismo hay mucha gente dentro de la comunidad de Glide que te ayudará ese mismo día'.

Primero hay que asentar los fundamentos y asegurarse de que todo funciona, pero no hay que olvidarse de pulir.

‍2. Las aplicaciones personalizadas hacen que tu empresa parezca más profesional

En nuestra empresa, en particular, es imposible que nuestros empleados lo sepan todo. Hay demasiadas cosas que saber y creo que lo mismo ocurre en muchas otras empresas. Aunque nadie puede cambiar esto, con una aplicación como Techstar puedes asegurarte de que lo tienes todo a mano. Esto significa que, cuando estás delante de los clientes, puedes decir que puedes acceder a la información fácil y rápidamente. Esto hace que la empresa parezca más profesional y organizada, y puede tener muchos efectos positivos. Por eso otras empresas nos han pedido que diseñemos aplicaciones para ellas". 

3. Ha hecho maravillas con el compromiso de los empleados

Otra cosa que nos ha sorprendido es lo mucho más comprometidos que están los empleados cuando utilizan una aplicación móvil en lugar de los métodos tradicionales: encuestas en línea, correos electrónicos, etc. Antes, cuando enviábamos un boletín de la empresa, quizá solo el 25% de los empleados lo leía. Antes, cuando enviábamos un boletín de la empresa, solo lo leía el 25% de los empleados. Pero cuando empezamos a publicarlo en Techstar, el número de lectores aumentó considerablemente. De repente, ¡más de la mitad de la empresa leía el boletín! Además, hemos observado beneficios en muchos ámbitos. Incluso en ciberseguridad. Cada Navidad había montones de nuevas tácticas de phishing. Al tener una aplicación móvil, los empleados pueden ver cuáles son los intentos más recientes, lo que hace que la empresa esté más segura. Más sólida. Nuestros ejecutivos se lanzaron a por ello, y esto nos ha llevado a hacer mucho más con la aplicación y a crear más aplicaciones móviles".

Con nuestro negocio es imposible que nuestros empleados lo sepan todo. Con una app como Techstar puedes asegurarte de tenerlo todo a mano. 

4. Si la aplicación es buena, la gente la usará 

Cliff y yo fuimos las dos primeras personas en ver el número de interacciones en la aplicación y sabíamos que iba a ser grande, pero aun así mucha gente decía que no iba a funcionar. En una de nuestras primeras reuniones con ejecutivos, les presentamos la idea de tener una sección de desarrollo en la aplicación, pero no les gustó nada. Así que hubo una reticencia inicial a involucrarse. La gente era naturalmente escéptica. 

Pero con el tiempo se arregló solo, porque los técnicos hablaban entre ellos. Hay que reconocer que nos llevó algún tiempo enseñar a la gente a descargar la aplicación y enviamos códigos QR y correos electrónicos. Fue lento, pero al final el boca a boca hizo que se extendiera como la pólvora. Los técnicos empezaron a ver las ventajas de la aplicación. Así que sí, a veces hay que tener paciencia".